Miles de personas despiden al "rey del pop" dentro y fuera del estadio Staples Center. Antes, hubo una ceremonia privada para la familia y allegados en un cementerio en Hollywood. Unos mil millones de personas verán la transmisión por TV e Internet.
Poco después de las 14 (hora de la Argentina), comenzó el multitudinario funeral de Michael Jackson. La ceremonia para dar un último adiós al "rey del pop" se realiza en el estadio Staples Center de Los Angeles, con la presencia de unas 17.500 personas (11.000 que consiguieron entradas y otros 6.500 que lo ven en pantallas en los alrededores).
Los Angeles, conocida como la "capital mundial de la industria del entretenimiento", despertó lista para encarar uno de los días más importantes de su historia. Desde antes del amanecer miles de fans estaban en marcha para participar en la despedida del cantante o recordarlo en las calles. Se estima que mil millones de personas seguirán la transmisión por televisión e Internet, en uno de los eventos más mediáticos de la historia.
Antes de su traslado al Staples Center en un féretro dorado cubierto de rosas rojas, familiares y allegados del cantante se despidieron en un funeral privado en el cementerio Forest Lawn, en las colinas de Hollywood. Según el sitio web TMZ –que dio la primicia sobre la muerte del cantante, el 25 de junio, a los 50 años-, el ataúd es un modelo de 25 mil dólares de bronce sólido con un baño de oro de 14 quilates, pulido y enfundado en su interior con terciopelo azul.
El funeral, que estaba previsto que diera comienzo a las 8 hora local, se inicio con algo más de 30 minutos de retraso, después de que la caravana llegara al cementerio después de las 8.15 hora local. La familia fue escoltada por un fuerte dispositivo policial en su trayecto por Los Angeles, para evitar incidentes. Incluso se cortó el tráfico en las calles por donde pasó la caravana de Rolls-Royces, Cadillacs y Range Rovers de color negro y vidrios polarizados.
En tanto, la actriz Elizabeth Taylor, amiga de muchos años de Michael, anunció que no participará en la conmemoración pública del cantante muerto el 25 de junio pasado. "Se me pidió que hablara en el Staples Center. No creo que Michael hubiese querido que yo compartiera eso que experimentó con millones de otras personas", dijo la actriz. "Aquello que vivimos nos concierne a nosotros dos", explicó.
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